Pide al Gobierno que incremente los fondos destinados a la ayuda humanitaria

CÓMO ASEGURAMOS ALIMENTOS Y TRABAJO DIGNO

Cooperamos en proyectos de desarrollo para mejorar las condiciones de vida de las personas más desfavorecidas. En la mayoría de programas trabajamos junto a organizaciones locales partiendo de sus prioridades, sin crear dependencias y acompañándolas en su trabajo para acceder a unos medios de vida sostenibles, así como a la salud, a la educación y a la participación social y política desde su propia identidad.

Nuestra apuesta es pasar de proyectos a programas de medio y largo plazo de modo que todas las acciones estén articuladas bajo una única estrategia diseñada en función del contexto, de las necesidades existentes y de las capacidades disponibles. Entendemos que las raíces de la pobreza y la vulnerabilidad son la falta de acceso a los derechos humanos básicos debido en parte a la discriminación de ciertos grupos de población sobre otros. Por ello, creemos que el desarrollo no se refiere tan sólo a garantizar el acceso a recursos económicos y materiales, sino también a la ciudadanía activa, la participación y los cambios en la posición social.

Cambio social desde dentro

Creemos que las organizaciones de la sociedad civil, los individuos y otros actores tienen la capacidad de producir cambios en las estructuras políticas, sociales y económicas injustas. Nuestras copartes y el resto de la sociedad civil son los verdaderos agentes activos en el desarrollo de procesos que produzcan cambios en políticas, prácticas, ideas y creencias. Cambios duraderos en la vida de las personas a través de estrategias que combinen el trabajo de incidencia política y movilización social con proyectos de desarrollo en las comunidades más vulnerables.

Creemos que los cambios sostenibles en los derechos humanos de las personas excluidas sólo pueden conseguirse invirtiendo las relaciones de poder injustas y aumentando la capacidad y formación de las personas en los procesos de desarrollo para que tomen sus propias decisiones. En este sentido, el empoderamiento es un medio y un fin en sí mismo.

Por último, para promover cambios positivos en la vida de mujeres y hombres en lo concerniente a cuestiones de justicia de género, ya no podemos trabajar pensando sólo en las relaciones entre éstos, sino en las instituciones que producen y reproducen desigualdades entre sexos y en cómo debemos revisar tanto el trabajo de estas instituciones como el nuestro para evitar este hecho.

¿QUIERES SABER LO QUE CONSEGUIMOS?

Consulta nuestro informe anual sobre Alimentos y Trabajo Digno, en el que puedes descubrir cómo tu colaboración contribuye a construir un futuro sin pobreza.

Últimos informes