El texto de la COP30 es “inaceptable” y falla a las comunidades en primera línea de los desastres climáticos
Foto: Rodrigo Correi / Oxfam
En respuesta al último texto de “Mutirão” presentado en la COP30, Nafkote Dabi, responsable de Política Climática de Oxfam Internacional, señala:
“Mientras la COP30 avanza hacia su recta final, los líderes mundiales están jugando con el planeta y con la vida de las personas más pobres. Los países ricos están tratando la financiación para adaptación como si fuera una moneda de cambio. Pero la financiación para adaptación es una tabla de salvación para millones de personas: desde agricultores y agricultoras que sufren las consecuencias de cosechas perdidas hasta familias que ya han sido desplazadas por desastres climáticos.
Los países ricos deben comprometerse a aportar al menos 120.000 millones de dólares anuales en financiación para adaptación a partir de 2025, además de aumentar los fondos pendientes para alcanzar el objetivo de 300.000 millones anuales acordado el año pasado. Cualquier cifra inferior deja a las comunidades en primera línea peligrosamente expuestas.
Es inaceptable que el nuevo texto no incluya la elaboración de una hoja de ruta para la eliminación progresiva de los combustibles fósiles ni tenga capacidad real para responder a la peligrosa brecha de ambición que resulta de los débiles planes climáticos que los países han presentado. Una hoja de ruta es esencial y debe ser justa, equitativa y respaldada por un apoyo real para el Sur Global. Los países desarrollados, que se enriquecieron sobre economías basadas en combustibles fósiles, deben ser los primeros y los más rápidos en eliminarlos, al tiempo que financian sendas de descarbonización para el Sur Global”.
Además, Viviana Santiago, directora ejecutiva de Oxfam Brasil, afirma:
“Los países del Sur Global —especialmente los más pobres y vulnerables al clima— llegaron a Belém buscando avances reales en adaptación y financiación. Con el aumento de los eventos climáticos extremos, la financiación para adaptación es una vital para los pueblos indígenas, las comunidades urbanas marginadas y las comunidades forestales que ya protegen los ecosistemas mientras enfrentan sequías, incendios y desplazamientos. La COP30 debe garantizar financiación para adaptación destinada a los países en desarrollo. Cualquier otra cosa deja a las comunidades en primera línea expuestas a los peores impactos climáticos.
Celebramos el reconocimiento de que la crisis climática afecta de forma desproporcionada a los grupos marginados, incluidos los afrodescendientes. Este reconocimiento llega con retraso, pues es necesario abordar las desigualdades raciales y los legados del colonialismo y la esclavitud. Todas las Partes deben defender este avance, y la sociedad civil brasileña debe seguir presionando para que la financiación de adaptación priorice a los grupos históricamente desatendidos.
La Presidencia de la COP30 debe asegurar un acuerdo que garantice justicia climática antirracista, adaptación climática que proteja a los grupos históricamente marginados, una financiación climática amplia, democrática y accesible, y un plan real y concreto.
“La Presidencia brasileña debe asegurar que la justicia y la equidad sean los pilares de los resultados de la COP30: no puede terminar en palabras vacías. Las comunidades en primera línea necesitan justicia, financiación y compromisos concretos ahora".
Notas para la edición:
Descarga los informes:
-Desigualdad climática en España
-Saqueo Climático. Una poderosa minoría nos aboca al desastre
Periodista
Oxfam Intermón es miembro de la confederación internacional Oxfam.